La maratón que nunca podrá ser (capítulo 3)
Cuando me hago un mapa de la situación, veo que el Maratón me dice adiós con lágrimas en sus ojos. Según el médico, podré empezar a hacer elíptica y bicicleta en febrero y no estaré disponible para empezar a trotar hasta el mes de marzo. Me he quedado hecho papilla y cabreado conmigo mismo por haberme hecho daño de una forma tan estúpida e infantil. No se trata de ningún drama, porque puedo hacer vida normal y ando sin ningún tipo de dolor. Pero a la vez para mí sí que es un drama, ya que la normalidad no la entiendo sin el deporte.
No puedo impactar, ya que con la torcedura me quedó afectado el astrágalo, hueso que no sabía que ni tenía y que es de vital importancia a la hora de aguantar el peso del cuerpo. Tras hablar con mi entrenador me da la clave y realmente me ilumina. Estuve un par de semanas realmente ofuscado, de mala leche, alicaído y desorientado, entre la lesión y los resultados de la resonancia que me hice a principios de enero. Estaba al 100% enfocado en todo lo que me estaba perdiendo y fustigándome, más que en intentar buscar una solución que me hiciera feliz.
Entonces entendí que podía resolver el problema con una nueva ecuación para 2017. Si el deporte era innegociable y el impacto estaba prohibido, tenía que buscar una alternativa. La bicicleta no me ha llamado nunca en exceso y, la verdad, cada vez me da más miedo compartir carretera con los coches. Aunque al principio el agua era lo que más detestaba del triatlón, gracias a las clases de técnica de natación le pillé el gustillo y me enamoré de la sensación de nadar a mar abierto con el neopreno, cuando la playa de la Barceloneta está desierta (en abril y octubre sobre todo). Así que este año me dedicaré a nadar y a fortalecer el tobillo para que en 2018 la maratón de Barcelona no se convierta en la segunda maratón que no pudo ser…
¿Te cuesta mucho encontrar alternativas? ¿O rápidamente encuentras la luz del túnel en el que te has metido?
photo credit: Medellín Ciudad Inteligente Taller Ideación · Mi Medellín via photopin (license)
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