¿Te importa un huevo el último?
¿Papá, cuantas carreras has ganado? Esta fue una de las primeras respuestas embarazosas que tuve que dar a mi hija cuando se convirtió en una máquina de hacer preguntas. La respuesta fue sencilla: «Ninguna». Me hizo reflexionar mucho. Recuerdo mi mejor momento de forma, en 2012, preparándome para mi primer medio Ironman (y hasta la fecha único). Participé en el duatlón de Reus. El inicio era curioso, ya que salíamos de la pista de atletismo del Reus Ploms. Hice mi primer kilómetro a ritmo de 3’50». Me sentía fuerte -tenía la sensación que el pecho se me salía del cuerpo- y a la vez me notaba muy ligero. Eché la vista hacia atrás un segundo y pude componerme un mapa claro de la situación. El mejor Ivan de la historia iba colocado en el último tercio de carrera.
Esa reflexión me generó un gran ¿Por qué?. La pregunta de porqué invertía tantas horas practicando deporte, costándome dinero de mi bolsillo y sin optar a ganar nunca. Por mucho que buscara en diferentes caminos de mi laberinto mental, todo me llevaba al mismo lugar: «Porqué me gusta y me lo paso bien».
Aunque llegaron 26 días, 5 horas, 9 minutos y 15 segundos después del vencedor, los dos tripulantes del Spirit of Hungary, estaban exultantes. Los últimos en llegar al puerto de Barcelona y cerrar así la tercera edición de la Barcelona World Race. Sortearon un montón de problemas técnicos y una configuración de velas equivocada. Se descolgaron del resto de embarcaciones, pero siguieron a lo suyo. Y casi un mes más tarde que los vencedores, consiguieron su premio.
Y sin tiempo casi para volver a sentir tierra, al día siguiente estuvieron presentes en la ceremonia de entrega de premios. Desde el primero al último clasificado tuvieron su reconocimiento. No como en el ciclismo, que en etapas de montaña aún están llegando los más rezagados cuando se entrega el maillot al ganador de la etapa…
¿Reconoces el trabajo de el último? ¿O solo hay que centrarse en premiar el trabajo de los mejores?
photo credit: Poker face. via photopin (license)
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