¿Tienes la alfombra repleta de mierda?
Que la sociedad está en crisis es una realidad que no sorprende a casi nadie. Cuando todas las estructuras, instituciones y realidades se siembran de dudas y no se sabe bien bien hacia dónde hay que dirigirse, solo nos salva la lógica y la coherencia. La lógica dice que la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres tiene que ser el eje central del siglo XXI. También queda bastante claro que la tolerancia y el respeto a las tradiciones de cada individuo deberían pasar por encima de todo. Así que cuando se mezcla la desigualdad de género con la falta de sensibilidad cultural, te encuentras un pastelazo putrefacto como el que tienen que vivir las participantes del mundial femenino de ajedrez.
Para empezar el formato es diferente al masculino. La campeona del mundo, Yifán Hou, ha renunciado a la competición por este triste hecho. La guinda amarga y pasada la sufrirán todas las jugadoras, teniendo que competir con velo e ir acompañadas de compañía masculina al salir a la calle… Es el peaje que hay que pagar por jugar la competición en la capital de Irán. Y lo más triste de todo es que se ha señalado un pacto entre organizadores y participantes para que las jugadoras puedan quitarse el velo cuando las cámaras y autoridades abandonen el escenario, tras los primeros minutos de juego. Así las autoridades contentas y las jugadoras no tendrán que pasar por el trance de tener que preocuparse del calor más que de su partida.
En el siglo XXI se han puesto en cuestión estructuras, instituciones y realidades, aunque hay realidades rancias que se mantienen y atentan contra la lógica y la coherencia. La mierda acumulada en la alfombra persa parece que quedará oculta, pero está tomando forma de montaña de 8.000 metros…
¿Qué es más importante, los jugadores o los organizadores? ¿Quién gana, la libertad individual o las reglas culturales del anfitrión?
photo credit: A..L..H Esperando… via photopin (license)
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