Momentos críticos, nivel 3
El equipo en el que juega Anna ha completado una primera vuelta excelente. La remataron el domingo ganando en un partido disputado al Joventut de Badalona. Han materializado, de esta manera, el pleno de 8 victorias. Y en estos momentos solo puedo acordarme de todo lo que han aprendido desde el principio de temporada. Veo que con solo 11 años ya empiezan a entender el juego de forma colectiva.
Su gran fortaleza radica en dos elementos. El primero y clave es la intensidad y las ganas que le ponen (jugando cada parte como si fuera la última y definitiva). Soy de la secta de los convencidos que uno juega como entrena. No funciona la teoría que sostiene que te ejercitas a medio gas y que ya lo darás todo en la competición…
El otro elemento primordial -que combinado con el primero se ha erigido como explosivo- es que han dejado de ser 11 jugadoras para convertirse en un equipo. De la suma de individualidades han pasado a la multiplicación como conjunto. La temporada es muy larga y cada partido es una historia muy diferente. Hay niñas que pasan por fases de falta de confianza, que les cuesta más entrar en los partidos o que se han ausentado en algún partido de forma puntual o se han lesionado. En ese momento, de forma natural e invisible, el resto de jugadoras suplen las ausencias y las carencias para mantener un alto nivel de desempeño. Todas son sumamente importantes y a la vez prescindibles.
Lo mejor y lo peor de todo es que solo hemos completado la mitad del trayecto, y que nos queda otra mitad más para seguir progresando. No sé que nos deparará el futuro, pero para mí ya son unas campeonas…
¿Te paras a reflexionar por qué las cosas te están saliendo bien? ¿O te dejas llevar por la euforia y la inercia?
photo credit: danieltoror TE INVITO A PENSAR… via photopin (license)
Publicar un comentario