¿Tomas partido aunque no te vaya nada en ello?
No entiendo el deporte sin la pasión ni el compromiso. Me encanta ir al cine solo y sumergirme en la historia que me están explicando, de forma pasiva. Pero en lo referente al deporte me gusta ser parte de la acción, estar en la grada y sentir la atmósfera que se va transformando a la par que evoluciona el juego. En la modalidad casera, le pregunto a mi hija quién quiere que gane y, automáticamente, yo tomo parte por el equipo contrario para estar divertidos todo el partido. Y si voy a un bar, me encanta estar reunido de amigos para rajar (sin faltar al personal ni caer en el insulto) y tirar de sarcasmo en público.
Nunca he visto una final en un bar o una peña de un club del que no fuera seguidor. Y nunca es tarde para hacer algo por primera vez. Así que, si esta noche el Athletic cumple con su parte (nunca Bilbao, por el amor de dios), yo el sábado 18 de abril estaré enfundado en mi camiseta de ketchup (me la consiguió mi mujer, con su número de serie de edición limitada, porque sencillamente me encantaba). La Real nunca me ha hecha nada, pero mi abuelo era del Athletic de Bilbao por la sencilla razón que era el único equipo que tenía solo jugadores españoles. Así que tengo la sangre y una camiseta hortera como poderosos argumentos para tomar partido en la final de Copa del Rey. Ahora ya solo hace falta cruzar los dedos y, si salimos victoriosos, esperar a que Gerardo me pase la ubicación whatsapp del lugar de reunión…
¿Necesitas tomar partido? ¿O si no juegan los tuyos no te interesa?
photo credit: jpellgen (@1179_jp) Heinz via photopin (license)
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