¿Pensabas que iba a durar para siempre?
Todo se acaba, no hay vuelta de hoja. Es una evidencia que nos recuerda que hay que aprovechar el tiempo y disfrutar de lo que tenemos. Incluso La Tierra, cuyo globo parece que gira como un carrusel sin fin, tendrá su particular epílogo, y cerrará la puerta sin queda nadie quede para abrirla de nuevo. Minúsculos seres unicelulares sobrevivirán al resto de especies y habitarán nuestro planeta hasta su último estertor, cerrando así el círculo que iniciaron hace ya unos lejanos 3.700 millones de años.
Y como nada es eterno, la selección alemana, una de las potencias mundiales del fútbol, ha decidido que abandonará a Adidas por un futuro con Nike. Acabará en 2027 una relación que se inició en el ecuador del siglo XX. Cuatro mundiales y tres eurocopas han levantado los teutones equipados con la elástica del símbolo de las tres bandas. En un mundo en el que manda la economía y en el que los sentimientos se circunscriben únicamente a las películas de Disney y a las series de Netlix, los 50 millones que le pagaba Adidas a la Federación Alemana se convirtieron en insuficientes. Así Alemania ha cambiado una empresa hermana por otra estadounidense.
Para el vencido es un momento delicado, azuzado por su delicada situación económica. Ya solo le queda exprimir hasta la última gota las dos próximas participaciones de la Mannschaft en competiciones internacionales. Y para el vencedor se trata de un espaldarazo y un balón de oxígeno para seguir creciendo. Y al aficionado, exceptuando algún que otro viejo nostálgico, pues le dará absolutamente igual. Qué más da una bandas que un ala; lo importante es que el balón entre…
¿No sabes imaginar el final? ¿O crees que todo durará para siempre?
Imagen de Gerd Altmann en Pixabay
Publicar un comentario