¿Ridículo inmenso?
En ocasiones, tu nivel de megalomanía puede hacerte llegar a límites insospechados, abriendo las puertas del absurdo. Y dentro de ese absurdo está tu verdad, esa verdad única y monolítica que te asiste totalmente, porque alguna divinidad te ha otorgado una lucidez fuera de lo común. Ahí ha quedado atrapado un tipo que, como controla España y campa a sus anchas como si fuera su cortijo particular, aún no ha entendido por qué el resto de territorios europeos y de ultramar no le rinden constante pleitesía.
La galleta cósmica que se llevó Florentino aún resuena por los pasillos de los estadios de media Champions. Y como el Real Madrid solo sabe ganar, pues no se presentó, operando como un crío de Infantil 3 al que no le dan la chuchería que quiere en ese preciso instante. Por cierto, un Balón de Oro que se le ha negado al futbolista más tonto y fantasma de la historia, y que ha recaído en todo un ejemplo, con todas las letras.
Y cuando ya crees que lo has visto todo, viene, de nuevo, el cuñao a recordarte que el premio era suyo, que se lo han robado al Real Madrid. Además, como el resultado no ha sido el esperado, hay que retorcer la mecánica del voto para que la máquina blanca vuelva a relucir esplendorosa. Por suerte España no es Europa, ni el balón de Oro es el proyecto Castor…
¿Das pena porque te crees con derecho a absolutamente todo?
Imagen de Gerd Altmann en Pixabay
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