¿Cuál es tu zombie preferido?
Un año y medio después del tercer revés a la candidatura olímpica de Madrid, los chorizos derivados de 12 años de sueños deportivos siguen colgando y encima pudriéndose. El Centro Acuático de Madrid se ha convertido un triste recordatorio de lo que pudo ser y que nunca fue. El testimonio mudo de un gigantesco esqueleto de hormigón que no verá ni público, ni nadadores, ni aplausos. Y la única agua que recibirá será la de la lluvia… Es un zombie arquitectónico en toda regla.
El saldo final es un armatoste a medio construir, abandonado, que lleva casi 5 años parado y con un coste de 112 millones de Euros. Es el claro ejemplo de la psicosis desmesurada del «vamos a ganar». No pensamos ni remotamente qué vamos a hacer si perdemos. Hay que encomendarse a todos los santos y enfocar toda la energía al «sí», porqué prever el «no» es de perdedores y fracasados. No habría mayor problema en tal planteamiento si te jugaras 10€ en la ruleta, al rojo o al negro. Pero si en esa tirada estuvieran en juego tus ahorros y tu patrimonio seguro que pensarías en un plan B por si sale mal.
Las candidaturas olímpicas sirven para modernizar ciudades, mejorar infraestructuras urbanas y deportivas y para poner en el mapa a sus sedes. Son una gran promoción para incentivar y potenciar las candidatas como destinos turísticos y focos de inversión económica. Pero cuando llega el fatídico «no», no existe el plan B y ahí queda el fiambre, bien visible. Y no puedes ni enterrarlo, ni esconderlo, ni llevarlo a otro lugar. Este muerto que está muy vivo.
¿Cuando presentas un proyecto es mejor enfocarse solo en ganarlo? ¿O mejor guardar algo de energía para pensar en un revés y no perder demasiado?
photo credit: World Zombie Day London 2011 DSC_8530 via photopin (license)
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