• ivanferrer
• A 04/05/2017

En una competición de varios días hay infinidad de momentos muertos que dan lugar a cafés, paseos, comentarios y conversaciones muy interesantes. El domingo por la tarde llegamos a los terrenos de juego sin saber aún si pasaríamos a las semifinales o jugaríamos los cruces del 5º al 8º puesto. Tras confirmarnos que disputaríamos el campeonato -tras ser el mejor segundo de los tres grupos-, tuvimos un tiempo de espera para ocupar nuestro lugar en el pabellón. Hubo un comentario acerca de la bronca que les había caído a nuestras entrenadoras por apuntarnos al torneo de Reus. La razón me perturbó con una mezcla de tristeza y estupefacción: en este tipo de torneos hay mucha gente viendo los partidos y si destaca alguna niña se la pueden llevar…

Tras cuatro días, ese argumento –que abrió un melón en mi cabeza- me tiene ensimismado en una profunda reflexión… Gracias al mundo del coaching y el trabajo mental en el mundo del deporte tengo la suerte de conocer a personajes como Roger Esteller, excapitán de Barça de baloncesto. En una de las conversaciones que hemos tenido me comentaba la gran diferencia que hay entre tirar a meterla o tirar a no fallar. En el primer caso lo veo como la ejecución de una acción que has entrenado infinidad de veces y que te permitirá acercarte a tus objetivos. El segundo caso viene cargado de nubarrones, enturbiado por una contundente diarrea mental que te tensa y encoge el brazo (“qué pasará si la cago”, “no podemos perder este partido”, “todo el mundo me señalará si no la meto”, “ya nadie confiará más en mí si fallo”…).

Está claro que en categorías inferiores hay ojeadores que rastrean talento para llevárselo a otros clubes más poderosos (como puede ser en el caso del Baix Llobregat el Cornellà o el Almeda); y los hemos visto en nuestro campo. La vida es prueba y riesgo. Así que prefiero correr el riesgo de exponer a un equipo ante muchas miradas que cerrarlo con llave y candado. Creo que se las niñas, las entrenadoras y los padres nos hemos llevado una experiencia magnífica que no la hubieran tenido quedándose en casa jugando con la Play al NBA 2K17.

To be or not to be; vivir desde la ambición o el miedo, esa es la cuestión…

¿Sales a comerte el mundo o te cierras como un caracol?

photo credit: Pablo Alvarez Corredera S_JPGE_1078_1 via photopin (license)