¿Eres el regalo de Navidad?
El próximo lunes, a la hora del ángelus, se conocerán los ocho cruces que supondrán la primera gran criba hacía la Champions League 2024. Como sostenía la mítica frase de Los inmortales; «solo puede quedar uno». Ese uno será el único que saldrá victorioso en tres eliminatorias y una final en el épico estadio de Wembley. El sorteo, seguro, será un anticipado regalo para uno de los equipos del bombo dos (configurado con todas las escuadras que han quedado en segundo lugar en sus respectivos grupos).
Y es que el lamentable estado de forma del Barça ha hecho que se convierta en una perita en dulce para cualquiera de sus futuros rivales. Más preocupados por lo que dicen desde el exterior que en resolver el desaguisado que tienen dentro, parece como que el equipo está atravesando una pequeña mala racha. Ya se han acabado los argumentos futbolísticos cuando se llega incluso a mencionar el comodín del público: la desgracia y la mala suerte. Xavi está satisfecho por cumplir el primer objetivo de la temporada: llegar a la fase del KO.
Pero más eufóricos estarán aún sus potenciales oponentes, que ya se frotan las manos ante la posibilidad de jugar contra un equipo que se ha convertido en una auténtica broma en defensa, en un coladero al más puro estilo de fútbol regional. La única suerte es que los azulgranas tendrán dos meses para recomponerse -o para seguir cayendo y endulzándose a ojos del resto de aspirantes a levantar la orejona en Londres, el próximo 1 de junio. Viéndolos ayer, si pasan a cuartos los de Xavi será un auténtico milagro…
¿Tu estado de forma es un regalo para los rivales?
Imagen de Yevhen Buzuk en Pixabay
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