¿Serías capaz de darle el timón a alguien que lo pueda hacer mejor que tú?
El pasado martes 3 de octubre, los clubes en los que juegan mis dos hijos –Bàsquet Club Sant Joan Despí y Club Hockey Jujol Jokers– decidieron suspender todos los entrenamientos como protesta a la violencia policial ejercida durante el pasado 1 de octubre. Yo soy de la opinión que las entidades deportivas, como agentes sociales, no deben ser ajenos a la realidad que les rodea. La filosofía que sostiene que el deporte tiene que ir en paralelo a todo, no va conmigo. Por esa misma razón consideré lamentable que el Barcelona decidiera jugar su partido de liga, contra Las Palmas en el Camp Nou; demostraron estar sencillamente en otro planeta.
Por eso no entiendo por qué esta tarde mi hija ha lanzado el balón a canasta o mi hijo le hubiera podido dar con el stick al puck, de no ser porqué su entrenadora estaba enferma. Me parece increíble que no seamos sensibles a la reivindicación de hoy. Todos tenemos abuelas, madres, hijas, hermanas, tías, sobrinas, primas… Y me parece alucinante que no las apoyemos. Está demostrado que el mundo se va a la mierda porqué ha estado gobernado históricamente por una lacra testosterónica materializado en el género masculino. Sin ninguna duda: lo hemos hecho como el puto culo. Dale el mundo a una panda de gilipollas y te encontrarás con lo que sufrimos en la actualidad: desigualdades por doquier en un planeta comandado por el poder y dinero…
Creo que por dignidad, sensatez y lógica deberíamos dejarles el timón a ellas, nuestras mujeres. Y hoy es un buen momento para dejarlo claro. Una sociedad tan ruda como la espartana, ya lo tenía claro hace 3.000 años:
-¿Por qué esta mujer interviene en una conversación de hombres?
-Porqué sólo las espartanas traemos al mundo a hombres de verdad.
Ya va siendo hora que nos pongamos las pilas…
photo credit: Sarah Mirk Equal Pay for Equal Work via photopin (license)
PD: Me siento orgulloso que mi mujer tenga mejor sueldo que el mío, que mi suegra y mi madre sean las almas y pilares de sus respectivas familias -sin necesidad de replicar los roles masculinos- y que mi hermana sea independiente y sepa salir adelante sola con sus dos hijas.
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