Me piro vampiro (si se lía parda y yo no quiero decidir nada)
Te encuentras en la parte alta de una ladera. Tienes una posición más que privilegiada, desde la que lo controlas todo. Y te encuentras una mañana, relajado, tomándote un café con leche en vaso (que sabe infinitamente mejor que en taza) y unas tostadas de pan de molde con mermelada y mantequilla. Mientras degustas el desayuno, solo puedes hacer una cosa: gustarte a ti mismo por encima de todas las cosas…
Pero tu paz se interrumpe por un estruendo en la cúspide de la montaña. Se ha desprendido una enorme placa de nieve perpetua que te va a arrastrar. Tienes poco tiempo, pero algo puedes hacer para salvar a los que están en el valle, ajenos a la que se les avecina… Pero tú, que te sigues gustando mogollón haces un quiebre para salvar tu culo… El resto ya se apañará como pueda… No vaya a ser que se te enfríe el café y las tostadas…
El marrón, traspasado por el COI a las Federaciones Internacionales con el tema del dopaje ruso, ha dejado con el culo al aire al olimpismo. El movimiento, que aboga por la ética en el deporte, ha sido incapaz de expulsar a un país que se ha acreditado como tramposo a lo grande. Ha pasado del tema y ha dejado la patata caliente a cada deporte, para que decida individualmente si los admite o no en los Juegos de Río.
Entonces yo me pregunto: ¿para qué coño sirve el COI? ¿¿¿O es que tal vez es en realidad el Comité Olímpico Inactivo???
¿Eres de los que te vas cuando ves los problemas llegar? ¿O tu sentido de la responsabilidad te lo impide?
photo credit: Objetos y Reliquias via photopin (license)
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