¿Para qué mimar al cliente?
La gran enseñanza que me han aportado las ultras -importa poco si son de asfalto o de montaña- es que puedes llegar a conseguir dos victorias. La primera, y más obvia para el común de los mortales, es acabarla. Cruzar la línea de meta te lleva a un estado de paz difícil de explicar. El cansancio, el dolor, la tensión acumulada… todo se acaba disipando para dar lugar a un estadio zen en el que todo está bien, aunque físicamente estés fundido.
La segunda victoria, la invisible, la que el público no aplaude, es en realidad la mejor. La que únicamente valora el que ha pasado por ella; el que vive la realidad desde la trinchera, en primera persona. Ese éxito reside en estar en la línea de salida tras meses de duros entrenamientos. Te especializas en añadir a la ecuación profesional de entrenar, comer y dormir las incógnitas amateurs del trabajo y la familia. Y ello te convierte en una suerte de malabarista del tiempo que lo doma y lo estira como un chicle. Robas horas a la madrugada. Desafías a los días de perros que invitan a caldito, mantita y sofá. Le pones todo tu corazón y toda tu alma…
Y algunas organizaciones de carreras se olvidan de eso. Y me envía un whatsapp Jordi, entre devastado e indignado, porqué su carrera de 105 kilómetros se ha convertido, por arte de magia, en una de 48, por el temporal Gloria. Te avisan, a solo 4 días de la salida. Y no te ofrecen, como alternativa, realizar dos vueltas al mismo recorrido. Y como si de una broma de mal gusto se tratara, en el cuarto punto del comunicado te anuncian como gran atención que “para compensar las molestias, todos los corredores de la ULTRA tendrán la inscripción para el 2021 con un descuento equivalente a la diferencia de precio entre HALF y ULTRA.” Como dicen ahora los millenials: what the fuck?!* Con amigos como los organizadores de la Ultra Trail Montnegre el Corredor te sobran los enemigos…
¿De verdad piensas en el cliente?
photo credit: Ramon Oromí Farré @sobreelterreny Imatge gòtica de Santa Anna i la marededéu | Museu Comarcal de l’Urgell via photopin (license)
Publicar un comentario