¿Qué música has puesto para atacar la cumbre?
No hay elemento más aterrador que la perspectiva de perder una semifinal de una final four tras una inmaculada trayectoria en liga regular de 16 victorias y 2 empates. Eso fue justo lo que, desgraciadamente, le pasó al infantil de Jujol que, tras imponerse como líder, de forma clara en liga regular, cayó ante el cuarto clasificado.
Los benjamines decidieron, desde los primeros acordes del partido, imprimir un denso, asfixiante, trepidante, absorbente y frenético ritmo de partido, tanto en ataque como en defensa. Se emplearon tan a fondo los 11 jugadores que el guión final quedó casi definido en la primera de las tres partes. Fue una lluvia de juego colectivo en la que no había en el planeta compuerta que fuera capaz de contenerla.
La final, sorprendentemente, fue más de lo mismo, con un despiadado Jujol que parecía un insatisfecho T-Rex devorando un muñeco de trapo gigante. Los dos latigazos que entraron en los compases iniciales encarrilaron el partido, hasta amplificar el marcador con un 5-0. Los dos goles segudios de Gadex me hicieron pensar, por un instante, en la estratosférica remontada en liga regular en la que Jujol neutralizó 5 goles de diferencia. Pero ese día no había lugar para las remontadas, solo un equipo dispuesto a imponerse por KO…
¿Qué ritmo imprimes pagar ganar? ¿Contemporizar o vencer por la vía rápida?
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