¿Trascendentalmente intrascendente?
El domingo fue jornada de gran celebración: Oriol cumplía 9 años. Por la mañana escape room con los compañeros del colegio y, por la tarde, tras el partido de hockey, merendola con el equipo. Oriol, que llevaba despierto desde las siete de la mañana, nervioso por la trascendencia del día, cayó frito en el trayecto en coche desde casa hacia la pista.
El partido fue muy entretenido. La primera parte fue para el Jujol, por 2-4. La segunda se la llevaron Tsunamis por 2-0; así que todo quedaba en el aire, a expensas de lo que sucediera en el tercer tiempo. Con el marcador 1-1 y en superioridad, Oriol encaró al portero marcando el 1-2. Mientras patinaba rebosante de alegría, dedicando el tanto a su madre, en la grada le cantaron el cumpleaños feliz. Su bonita su cara, colorada, se redondeó como un sol ante tanta emoción. Después vino la épica cuando, a falta de 2:40, se quedaron en inferioridad y los niños consiguieron defender el resultado con mucho acierto, salvando así la victoria.
Y después de la ducha, pastas, bocadillos, zumos, galletas, chocolatinas. Y tras el ágape, como no podía ser de otra manera, acabamos en la feria ambulante que había instalada en el parque delante de la pista. Los niños disfrutaron en una caseta, cazando patitos con una caña en un riachuelo (veo que hay atracciones que nunca mueren).
Para mí fue un día profundamente trascendente e importante dentro de las cosas que nunca saldrán en los libros de historia, pero que se escriben en letras multicolor en mi cuaderno de bitácora. El problema es que, desde el 24 de febrero, infinidad de niños y adultos ya no tienen pequeñeces por las que preocuparse…
Vladimir, eres una desgracia y una vergüenza para la raza humana. No eres más que una auténtica basura adornada por ínfulas extremas de poder, un loco y un asesino a la altura de cafres y descerebrados como Hitler. Deja ya de robar a los niños y a las familias de Ucrania días luminosos y especiales como los que disfrutamos nosotros el pasado domingo.
Parad YA la invasión de Ucrania. NO A LA GUERRA; ni ésta ni ninguna otra.
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Buenisimo post Ivan, el que mas he ha gustado de todos. ALEGRIA CON MAYUSCULAS, la sal de la vida, es todo eso y mucho mas. El cabron desalmado del kremlin me gustaria que lo leyese. Pero lo importante es el dia qie pasaste tan fenomenal. Mientras el otro… esta cavando su propia tumba, y por desgracia la de otros muchos. Un abrazo
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