Image Image Image Image Image Image Image Image Image Image

Deportes y Comunicación | March 15, 2025

Scroll arriba

Arriba

Sin comentarios

¿Has corrido envuelto en una bola de fuego?

¿Has corrido envuelto en una bola de fuego?
ivanferrer

Ayer tuve la brillantísima idea de hacer mi entrenamiento de 22 km a las 14:15. A lo que tenía que ser, según la planificación una 2 horas y 4 minutos, le añadir media hora más, en modo zombie parade. Desde el primer minuto, el sol caía como un yunque de 200 kilos en una fundición a pleno rendimiento. Era más pesado y cansino que Shakira dedicando canciones a Piqué. Ante tal poder demoledor, fui buscando sobras como un loco durante todo el recorrido.

Cuando lleva 8 kilómetros ya me dije mentalmente a mí mismo que la carrera iba a ser dura y larga. Durante el último kilómetro, me había vaciado y ya no podía más, así que lo hice andando. La práctica fue básicamente una lucha titánica para devorar los quilómetros con las mismas sensaciones que cuando comes sin tener el más mínimo apetito. El motor mental que me instalé para no dejar de avanzar, en medio de un ambiente sofocante, fue la idea de tomarme una limonada de litro cuando pasara por la tienda de frutas y verduras camino del casal de hockey en línea de Oriol (los treinta minutos extra me imposibilitaron ducharme hasta después de recogerle).

Tuve la suerte que mi mujer estaba por la zona y se pasó con el coche. En caso contrario hubiera protagonizado la Odisea de Homero para recorrer el escaso kilómetro que separa el pabellón de Ítaca…

P.D.: Todo el esfuerzo lo acabé pagando con dos latigazos en el sofá, uno en la planta del pie derecho y otro en el gemelo de la misma pierna.

Moraleja: ¡En verano sal de noche o de madrugada!

¿Sales a entrenar en el peor momento del día?

Imagen de Pexels en Pixabay

Publicar un comentario

Rellena el Captcha (para evitar el spam) * Time limit is exhausted. Please reload CAPTCHA.